21/4/09

La Realidad Mexicana















En México siempre hemos vivido bajo la opresión de un sistema o ideología. Desde el sistema colonial español, pasando por la iglesia católica (aún muy vigente), hasta ahora con el sistema neoliberal, hemos visto la forma en que se ha formado la consciencia mexicana. Estos cambios a través de las distintas etapas de México han marcado las virtudes y defectos de sus ciudadanos; leal pero engañoso, bondadoso pero avaro, amable pero egoísta, y todas estas situaciones se derivan directamente de nuestra relación con los sistemas de control y las injusticias sociales que han creado.


Algo que me atormenta en lo personal es resultado de la sencilla observación de que como sociedad fomentamos la contradicción de ideas y actitudes. Por un lado, somos fieles y firmes en decir que gozamos de soberanía, sin embargo nuestro gobierno permite intervención por parte de gabinetes ajenos cuando empieza a perder el control. Por el otro, la sociedad también es merecedora de culpa, ya que predicamos valores y virtudes de respeto e igualdad, sin embargo en su mayoría somos intolerantes y discriminatorios contra aquellos que han vivido en el territorio durante siglos, los indígenas. Así mismo nos quejamos de las injusticias y la corrupción rampante que vive el país, pero como sociedad, no tenemos las agallas ni mucho menos la decencia de hacer algo por cambiar las cosas.

 

Estas notorias y asquerosas verdades son sólo algunas de las condiciones a las que estamos sujetos como sociedad. La tristeza de esto es que no vemos la realidad: tanto el país como nosotros los ciudadanos estamos consolidando la visión de la comunidad internacional ante México y empobreciendo nuestro nivel de vida en general. Por esta razón México ha perdido fuerza vital en materia de relaciones internacionales, por esta razón la comunidad internacional nos ve como la cola del león, ¡no nos estamos dándo a respetar! Por esto es necesario que los ciudadanos mexicanos empiezen a ver la vida a través de ojos más críticos y conscientes, ya que es muy cierto que nuestra realidad la creamos nostros, la sociedad.

 

Únicamente creando situaciones de justicia y seguridad, librándonos de ideologías arcáicas detrimentales para el progreso de México creceremos como una nación.

1 comentario:

  1. ¿Cómo no compartir estas ideas?, sin embargo debemos ahondar más profundamente en las causas de esta sujeción, en el porqué de nuestro sometimiento. No en los responsables porque tienen nombre y apellido, sino en las dinámicas, los proyectos, las políticas públicas, en suma, en los posibles caminos por los que nuestra nación debe transitar para llegar al puerto que usted bien nos describe.

    No debería decir que usted es joven y le pertenece el futuro de México. Eso es un dislate. El presente de su país y de este continente ya es suyo, ¿qué más va a hacer con ese obsequio ahora?

    ResponderEliminar